Ing. Everardo Ramírez Landeros
Durante la semana pasada el Hemiciclo Juárez sufrió una tremenda traición, misma que obliga a quienes recordamos por todo lo bueno que contribuyó a nuestra Patria el expresidente Benito Juárez, a molestarnos, la hipócrita declaración vino de quien supuestamente ha tomado como referente al gobierno Juarista; El actual Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Luego de citar en un spot (con obvia publicidad a su interés personal) al Papa Francisco, con un ligero toque maquiavélico, AMLO pretende justificar todas las incompetentes, ineptas, autócratas y destructivas acciones que han marcado su gobierno a lo largo de 2 años.
Citando un fragmento del discurso expuesto por el sucesor de Pedro; “Luchar en favor de los pobres no es comunísimo, y que esto está en el centro de todos los evangelios”, El Presidente pretendía empatizar con el pueblo creyente de México, faltando por completo al Artículo 40 de nuestra Constitución, en la que nos define como una República laica.
Ya sea mostrando estampillas paganas, pidiendo permiso a la Madre Tierra para la construcción de un tren, quemando incienso en un avión o haciendo limpias a sillas recurriendo al chamanismo, el Presidente pretende seguir simpatizando con el Pueblo Mexicano. Lejos se ven los días en que el Primer Mandatario nos muestre resultados, sino que recurre a sus otros datos en infinitas ocasión para avalar, incluso, que es el segundo mejor Presidente del mundo.
Al citar al Jefe de Estado y Octavo Soberano del Vaticano, AMLO omitió una muy importante idea del discurso Papal:
“Un aspecto fundamental para promover a los pobres está en el modo en que los vemos. No sirve una mirada ideológica que termina usando a los pobres al servicio de otros intereses políticos y personales. Las ideologías terminan mal, no sirven. Las ideologías tienen una relación o incompleta o enferma o mala con el pueblo.”
“Las ideologías no asumen al pueblo. Por eso, fíjense en el siglo pasado. ¿En qué terminaron las ideologías? En dictaduras siempre... Piensan por el pueblo, no dejan pensar al pueblo...”
Dejando a modo de debate la falta constitucional (ya frecuente en la 4T), reflexionemos sobre la declaración del Papa ¿Qué no es López Obrador quien ha usado la desigualdad nacional en beneficio de su campaña política comparando incluso con mascotas a los pobres? ¿Qué no es el quien se describe como liberal pero utiliza ideologías puramente conservadoras para justificar sus actos? Entonces ¿Qué nos queda esperar de este gobierno? Probablemente, lo que ha venido siendo desde su inicio; Un sinfín de hipocresías y negligencias.
No calificaría de ignorantes a quienes tenemos fe en algún ser divino o en alguna religión, la espiritualidad, creo yo, es necesaria y la considero indispensable para la plenitud del ser humano. Yo consideraría ignorante y además sinvergüenza a quien cree que puede usar las religiones para ocultar que desgobierna un País.