2 de octubre no se olvida: 57 años del 68 en Tlatelolco
- La Noticia al Punto
- 2 oct
- 2 Min. de lectura

¿Qué ocurrió el 2 de octubre de 1968?
El 2 de octubre de 1968 marcó un momento decisivo en la historia de México. Ese día, en la Plaza de las Tres Culturas de Tlatelolco, se llevó a cabo una movilización estudiantil que terminó en una represión armada. Elementos del Ejército y fuerzas de seguridad abrieron fuego contra miles de jóvenes, profesores y ciudadanos que exigían libertades democráticas. El número exacto de víctimas permanece incierto, pero se reconoce como una de las tragedias más graves del siglo XX en el país.
Cada año, diversos colectivos, estudiantes y sobrevivientes del movimiento rememoran a quienes perdieron la vida durante esa jornada. La consigna “2 de octubre no se olvida” sigue presente como símbolo de memoria y resistencia.
¿Cómo se recuerda este hecho en la actualidad?
A lo largo de las décadas, las conmemoraciones han reunido a organizaciones sociales, sindicatos, estudiantes y familiares de desaparecidos. Estos actos incluyen marchas hacia el Centro Histórico, ofrendas florales en el memorial de la Plaza de las Tres Culturas y actividades culturales como danzas y cantos.
El Comité 68, integrado por sobrevivientes del movimiento, mantiene su presencia en estas manifestaciones. Con mantas y discursos, sus integrantes recuerdan que la exigencia de verdad y justicia continúa vigente. También se han sumado colectivos de madres buscadoras, normalistas rurales y asociaciones civiles que relacionan la lucha de 1968 con causas actuales.
Durante estas marchas, predominan carteles, banderas universitarias y mensajes de protesta que reafirman la importancia de mantener viva la memoria histórica. En ocasiones, los recorridos se ven acompañados por expresiones artísticas y consignas que vinculan el pasado con problemáticas sociales contemporáneas.
¿Por qué se mantiene viva la memoria del 68?
La masacre de Tlatelolco marcó un episodio de represión, y un parteaguas en la relación entre sociedad y gobierno. El recuerdo de los hechos ha trascendido generaciones porque representa la lucha por derechos fundamentales como la libertad de expresión, la organización estudiantil y la justicia social.
Las demandas surgidas entonces siguen encontrando eco en nuevos movimientos. Por ello, cada año, la fecha se convierte en un espacio de reflexión histórica y protesta social. Los nombres de las víctimas se mantienen en altares, veladoras y consignas que buscan impedir que el episodio quede en el olvido.
La voz colectiva recuerda que el 2 de octubre de 1968 no sólo es un acontecimiento del pasado, sino una memoria activa que continúa inspirando a quienes defienden la justicia y la libertad en México.
Por Cadena Política
Comentarios