El Vaticano informó la tarde del lunes 3 de marzo que el papa Francisco sufrió varios episodios de insuficiencia respiratoria aguda, lo que lo llevó a retomar la ventilación mecánica.
¿Qué le pasó al papa Francisco el lunes 3 de marzo?
A través de redes sociales, la Oficina de la Santa Sede informó sobre el estado de salud actual del papa Francisco, revelando que el pontífice volvió a la ventilación mecánica tras sufrir dos episodios de insuficiencia respiratoria aguda.
De acuerdo con los primeros reportes, estas crisis respiratorias fueron causadas por la acumulación de moco, el cual fue aspirado por médicos del hospital Gemelli de Roma en ambas ocasiones.
“Papa Francisco en el Gemelli: Sufre dos episodios de insuficiencia respiratoria aguda. Fueron causados por la acumulación de moco, que fue aspirado en ambas ocasiones. Se ha retomado la ventilación mecánica no invasiva. El Papa Francisco ha permanecido siempre consciente”, informó el Vaticano.
Aunque los médicos decidieron retomar la ventilación mecánica no invasiva, el Vaticano aseguró que el pontífice, de 88 años, ha permanecido siempre consciente. Durante la mañana del lunes, el papa Francisco se encontraba estable.
En riesgo de complicaciones críticas
Horas antes de que el Vaticano emitiera este comunicado, la Santa Sede había asegurado que el pontífice estaba en un estado médico estable, aunque con un cuadro clínico complejo, por lo que el pronóstico era reservado.
En un encuentro con los medios, la Santa Sede explicó que el papa estaba apirético (sin fiebre) y que “no requirió ventilación mecánica no invasiva, sino solo oxigenoterapia de alto flujo”, añadiendo que “no hubo consecuencias directas del episodio aislado de broncoespasmo del pasado 28 de febrero, aunque permanecía en riesgo de complicaciones críticas”.
Tras el informe médico, el papa Francisco desayunó por la mañana y comenzó sus terapias del día, ya que, según el Vaticano, había descansado bien durante la noche.
Por Carlos Aguilera
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