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Ousmane Dembélé rompe su maldición: gana el Balón de Oro 2025 y eclipsa al prodigio Lamine Yamal

  • Foto del escritor: La Noticia al Punto
    La Noticia al Punto
  • 22 sept
  • 1 Min. de lectura

En una noche que quedará grabada en la memoria del futbol mundial, Ousmane Dembélé se consagró como ganador del Balón de Oro 2025, un triunfo que trasciende lo deportivo para convertirse en símbolo de perseverancia y redención.


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Durante años, el “Mosquito” fue señalado por las lesiones y la irregularidad, pero esta temporada lo cambió todo: consistencia, madurez y determinación fueron sus armas para alcanzar la cima. El francés no solo se mantuvo sano y disponible, sino que brilló en cada escenario, siendo pieza clave en el éxito de su equipo. Sus desbordes, asistencias y capacidad de generar peligro lo consolidaron como el jugador más influyente de la campaña.


Este trofeo, más que un reconocimiento a su habilidad con ambos pies, celebra su transformación personal: de eterna promesa a leyenda consagrada del balompié.

La otra cara de la ceremonia estuvo en Barcelona. Lamine Yamal, el joven prodigio de 18 años, llegó como el gran favorito tras una temporada histórica, batiendo récords y despertando comparaciones con Lionel Messi. Sin embargo, el futbol eligió premiar la constancia de Dembélé sobre la explosión de juventud del atacante culé.


La postal más emotiva de la gala llegó cuando Yamal, con madurez inesperada, se puso de pie para aplaudir al veterano de 28 años. Un gesto que marcó el cierre de una rivalidad narrativa y dejó una enseñanza: el Balón de Oro no siempre se entrega al más brillante, sino al que supo resistir y renacer.


 
 
 

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