México declara guerra al acero ilegal: Economía endurece controles a importadores
- La Noticia al Punto

- hace 14 horas
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La Secretaría de Economía reforzará los requisitos para importar productos siderúrgicos en México y afinará los mecanismos de verificación, con el objetivo de frenar la triangulación y el uso de documentación apócrifa que distorsiona la trazabilidad del acero en el país. El ajuste forma parte de un anteproyecto publicado ante la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer).

Las medidas se sustentan en el esquema de Avisos Automáticos de Importación de Productos Siderúrgicos (AAIPS) y en el reciente Registro de Importadores de Productos Siderúrgicos (RIPS), con los cuales la autoridad busca cerrar los huecos que han permitido a operadores declarar falsamente el origen del acero y eludir medidas arancelarias derivadas de la Sección 232 de Estados Unidos.
Entre los ajustes más estrictos, Economía estableció que los certificados de molino y/o calidad solo tendrán validez si cuentan con firma autógrafa y sello físico, eliminando la posibilidad de agregar elementos digitales. También se precisará —sin espacio a interpretaciones— que el país de origen del acero, vinculado al proceso de “fundido y colado”, debe coincidir de manera exacta con lo declarado en el AAIPS por el importador.
El anteproyecto contempla sanciones severas: quienes presenten información falsa, alterada o inconsistente podrían enfrentar una inhabilitación de hasta cinco años para obtener nuevas autorizaciones, misma que aplicará también a socios y representantes legales.
El RIPS tampoco queda fuera de este endurecimiento, pues será más exigente tanto para obtenerlo como para conservarlo.
Medidas en sintonía con Estados Unidos
La Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero) respaldó las modificaciones al señalar que los AAIPS permiten monitorear el comercio legítimo y se alinean con los intereses regionales para evitar la triangulación, en un contexto de menor demanda global y sobrecapacidad creciente.
El organismo empresarial alertó que, según la OCDE, la sobrecapacidad mundial podría llegar a 721 millones de toneladas en 2027, mientras que China ya rompió récord en 2024 al exportar 118 millones de toneladas, una cifra cinco veces mayor a la producción total de acero en México.
“Es vital seguir trabajando de la mano con la Secretaría de Economía (…) ante el creciente desafío que representa el incremento de importaciones desleales”, indicó la Canacero.
Por su parte, Aristeo López, abogado de Clark Hill PLC, sostuvo que estos instrumentos responden a la presión de Estados Unidos, que desde 2019 ha exigido a México mecanismos de monitoreo más efectivos.
“No es que estén dando cumplimiento a ese acuerdo, pero Estados Unidos ha venido exigiendo un mecanismo de monitoreo”, afirmó.
Riesgo de tensiones comerciales
Sin embargo, no todos concuerdan con el enfoque del Gobierno mexicano.
Adrián Vázquez Benítez, socio director de VTZ Abogados, advirtió que los cambios podrían convertirse en una barrera comercial incompatible con las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
“La forma en que la Secretaría de Economía lo está manejando es como una licencia de importación que establece obstáculos técnicos al comercio”, cuestionó.
El especialista señaló que la amplia discrecionalidad en la aplicación de los requisitos —particularmente el uso del catálogo de molinos como filtro previo para obtener los avisos automáticos— abre la puerta a decisiones arbitrarias.
“La forma tan arbitraria en cómo están estableciendo estos requisitos pues son violatorias”, alertó.
Un sector entre la protección y la fricción
Si bien la industria mexicana del acero celebra el fortalecimiento de controles para frenar prácticas desleales, el panorama apunta a potenciales roces comerciales con socios internacionales y a una mayor fiscalización que podría complicar el flujo de importaciones legítimas.
El anteproyecto aún deberá ser evaluado, pero el mensaje de la autoridad es claro: la época del acero sin trazabilidad llegó a su fin.
Por Diana Ochoa








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