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"Algoritmos" por Claudia Padilla del 3 de noviembre


Este domingo nos encontramos con los que dan cheques de hule, las estadísticas y los que se van

 

SIN FONDOS 

Imagínese que le dan un cheque y de pronto se retacha, pero usted ya hizo su trabajo y todavía está buscando que le paguen.

Pues esas son las mismas estrategias que todavía tiene el PRI, cuando creíamos que lo habíamos visto todo, pues no fue así, pues sabemos de la compra de votos, la robadera de dinero, todo lo que saben hacer los del Revolucionario Institucional, pero que aquellas personas que todavía creían en el partido lo dejaron de hacer.


Ahí les va porque lo digo, fueron contratadas decenas de personas para que cuidaran las casillas en las pasadas elecciones, les ofrecieron 500 pesos por su día de trabajo, pero llegó el “vocero” o el que tiene mil funciones dentro del PRI estatal, Jorge Estopellan, y les dio un cheque por esa misma cantidad, que fue rebotado.

Creamos, y digo creamos que lo hizo con buena voluntad, pero cuando los representantes de casilla tuvieron un papel en lugar de dinero en efectivo vino la primera desilusión, pero la otra fue cuando fueron a cobrarlo y no tenía fondos. 

Ahí se armó Troya pues a casi cuatro meses ese pago no se les ha dado y por lo que vemos ni se lo darán pues falta voluntad.


La cuestión es que esto ya es de conocimiento de la líder estatal, Ruth Tiscareño y del diputado Alejandro Arias, pero nadie ha hecho nada para remediar la situación.

Lo que puede asombrar más es que se dice que quienes tuvieron la culpa fueron los que recibieron el cheque por no cobrarlo en tres días, pues porque supuestamente se bloquearon automáticamente y por eso no se dio el pago ¿qué? Ni ellos mismos se lo creen.

Así son las andanzas del viejo y el partido que no tiene nada qué hacer más que meter diputados plurinominales que sino hubiera sido por su alianza con el PAN ni eso hubieran obtenido.

La pregunta es ¿quién se quedó con ese dinerito?

Piensa mal y acertarás…

 

CIFRAS

En eso quedan los números de los policías asesinados en Guanajuato, suman ya 50 elementos muertos, la cifra más alta en todo el país, buenos o malos son los que han sido asesinados y ahí está.

En Celaya en menos de un año suman 26 y es considerado el municipio donde más matan a los elementos policíacos.

El último caso se presentó en León donde fueron asesinados tres custodios, así como lo escribo así de fácil es como se dan a conocer los números.


Muchos lamentos y muchos expedientes donde supuestamente le dan seguimiento a las decenas de ejecuciones de los elementos de seguridad.

La Fiscalía del Estado dicen que siguen en eso y seguirán,  pues no se ve claro sus intenciones de esclarecer los hechos, sea quien sea que haya participado.

Ese tipo de declaraciones donde dicen que están con los malos, beneficiarían a los buenos, esa es la gran incógnita.

Entre cifras y números son como los toreros…

 

ADIÓS 

Así es como le dijeron a la Oficial Mayor de Celaya, Araceli Morales, que solamente duró 21 días en el cargo.

En estas líneas, generalmente, tratamos de tener todas las versiones y yo estoy obligada a dárselas a conocer.

Todo comenzó porque a casi una veintena de elementos de Bomberos y Protección Civil les llegó una carta de despido, sin que ellos mismos supieran cuál era el motivo de su salida, es más nadie sabía.

Pero éste documento salió de las oficinas de la Oficialía Mayor, le llamaron línea de aprendizaje.

Todos regresaron a su cargo y digamos que ya estaban las cosas tranquilas, hasta que se dio el despido de Araceli Morales.

Ella a través del hermano del mismo alcalde, José Luis Ramírez, denunció en sus redes sociales violencia de género y violencia política, pero no hay una postura de la ex funcionaria.

Nadie ha dado una declaración clara de la salida, solamente que no hubo entendimiento, ojalá se de pronto, porque es poco tiempo para cambios.

Ni de aquí, ni de allá…

 

Yo este domingo me despido con fondos y sin línea, nos vemos la próxima porque recuerde que el que “no cae, resbala”.


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