Por Sandra Flores
Necesitados de un triunfo para recuperar confianza, los Lakers de Los Angeles derrotaron 124-121 a los Nuggets de Denver, con un triple en el último segundo del ala-pívot Kyle Kuzma y 29 puntos de su estrella LeBron James.
En el último choque de la jornada, los Lakers hicieron una apuesta fuerte por romper su racha de tres derrotas consecutivas.
A pesar de que tienen asegurado desde hace tiempo el primer lugar de la Conferencia Oeste, los Lakers han dejado malas sensaciones en este final de temporada y sumaban hasta este lunes cuatro derrotas y dos victorias en Disney World.
Buscando un triunfo como revulsivo, el entrenador Frank Vogel no solo no concedió descanso a sus figuras LeBron y Anthony Davis sino que los mantuvo 38 minutos en pista mientras los Nuggets jugaban todo el último cuarto con los suplentes.
James acabó el juego con 29 puntos, 12 asistencias y solo 1 rebote, mientras Davis firmó 27 puntos y 6 rebotes.
Los focos, sin embargo, se los llevó esta vez Kyle Kuzma, para quien fue diseñada la última jugada del partido, con empate a 121. El ala-pívot recibió la pelota en la esquina y clavó un triple para la victoria por encima del novato Bol-Bol, un pívot de 2,18m de altura.
Es una jugada que hemos ensayado algunas veces en las prácticas. El entrenador la pidió para mí y me dio la confianza", dijo Kuzma, que acabó el juego con 25 puntos.
"Me siento bien, realmente tengo confianza en este grupo", dijo de su lado Vogel.