“Vamos por buen camino”; secretario Alvar Cabeza de Vaca.
En pleno uso y abuso de la numeraria local, el secretario de Seguridad Pública del estado de Guanajuato, Alvar Cabeza de Vaca, aseguró que los homicidios dolosos están a la baja, y sobre esa base reflexionó que la política de prevención del delito que lleva al cabo su Secretaría: “no significa que es un fracaso”. Concluyó: “Vamos por buen camino” al cerrar su comparecencia ante la Soberanía, donde se hace la glosa del IV Informe de Gobierno presentado por Diego Sinhue Rodríguez.
Lo sorprendente de las respuestas, aclaraciones y razonamientos del personaje más longevo en ese cargo en el país, es que lo expuesto no pertenezca al texto del informe entregado por el gobernador Rodríguez Vallejo al Poder Legislativo, sino a sentencias sacadas a la “trompa talega” que pertenecen al orden de las ocurrencias o la puerilidad. No se puede “tapar el sol con un dedo” porque la violencia inhumana que reflejan los hechos, son partes de la inseguridad y la impunidad.
El funcionario dejaría de tratar de “tapar el sol con un dedo”, si los diputados locales, sobre todo la mayoría del conservador PAN, le ponen principio de realidad y verdad al tema de seguridad pública, tomando la gran oportunidad de reconocer un escenario lleno de problemas que la violencia se está encargando de homogenizar; lo violento como lo normal que supera los actos para convertirse en relación interpersonal, parte de la cultura.
Metimos en el ámbito de la complicidad a los gobiernos federal y estatal, de Andrés Manuel López Obrador y de Sinhue Rodríguez Vallejo, que usan la medición de la comisión de los homicidios dolosos sólo para recrear impactos mediáticos, donde los incrementos o decrementos de delitos suponen una verdad nacional o estatal, no para conformar la cimiente que sirva para producir planes y programas, nacional y estatal. Y sobrevengan todas las respuestas para la resolución del problema.
La masacre en un hotel de Celaya, con 11 personas asesinadas que ha escalado a niveles, nacional e internacional, es la piedra de toque de que la inseguridad en Guanajuato no está resolviendo, y la manera de utilizar la numeraria, es con la finalidad simular que se tienen avances. El secretario Cabeza de Vaca Appendini, aceptó que en 2021 hubo un incremento del narcomenudeo de 60 por ciento respecto de 2020, pero que es el estado que más droga ha incautada a los narcomenudistas.
En julio del 2020, hubo otra masacre en el estado de Guanajuato, en el Anexo (Centro de Rehabilitación) en la comunidad de Arandas en el municipio de Irapuato, en donde 27 jóvenes fueron ejecutados y otros 7 resultaron con heridos. El reporte: hombres armados a bordo de un vehículo rojo arribaron al fraccionamiento El Naranjal y descendieron frente al anexo “Recuperando mi vida”, ingresaron y les ordenaron a todos que se acostaran en el piso boca abajo, después les dispararon.
El titular de la SSPEG, aún no ha sido capaz de presentar estudios sobre cada uno de los tópicos o delitos ni la manera en que pueden enfrentarse ni tampoco la prospectiva de qué vendrá antes del cierre del sexenio. Sin embargo, el gobernador Sinhue Rodríguez, ni siquiera para “recrear” la visión sobre nueva seguridad pública, ha considerado removerlo aunque sea para recrear la esperanza del cambio. Alvar Cabeza de Vaca… ¡Forever!
Topografía.
Agrimensura. Inflación ignorada en la glosa.
El incremento de precios en los alimentos es uno de los problemas más severos que está enfrentando en el momento la población. De acuerdo con los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), la inflación se ubicó en 7.58 por ciento en la primera quincena de mayo, siendo los alimentos un elemento de fuerte presión al elevarse sus costos.
En este período el aguacate subió 13.38 por ciento a tasa quincenal, el jitomate 7.92 por ciento y los precios en loncherías, fondas y demás subieron 0.58 por ciento, influenciados por los aumentos a tortillas, pan y carnes. También hubo incrementos en productos como el huevo (1.94 por ciento), la naranja (9.01), el pollo (0.72), el chayote (24.97) y la leche pasteurizada (0.74).
La inflación agobia a la clase trabajadora que ve evaporar su salario, pero también está impactando en el sector productivo donde el aumento de precios en energéticos y materias primas está imponiendo ajustes a la productividad y por ende a la comercialización de bienes y servicios. El campo también está en la misma situación.
Por todo esto, ha resultado lamentable el pobre análisis desplegado en la comparecencia de Mauricio Usabiaga Díaz Barriga, aún como secretario de Desarrollo Económico Sustentable; Paulo Bañuelos Rosales, secretario de Desarrollo Agroalimentario y Rural, ante el Congreso del Estado para glosar el IV Informe de Gobierno y todo haya sido mostrado como miel sobre hojuelas, sin una evaluación clara y directa sobre el mayor problema del momento en la economía, la inflación y sin ofrecerse ajustes locales de fondo que ayuden a la población y las empresas. Tal vez porque ya Mauricio Usabiaga quedó fuera de la jugada política y Paulo Bañuelos, “nadan de muertitos”.