El capitán Lucio Arturo de la Rosa Boscó, coordinador del Centro Logístico de Rescatistas, ha confirmado que las labores de rescate en Acapulco continúan incansablemente luego del impacto del huracán "Otis".
Aunque la Secretaría de Marina (Semar) ha informado que no se han encontrado más cuerpos sin vida en la Bahía de Acapulco y ha comenzado con las tareas de dragado para retirar embarcaciones menores hundidas por la fuerza del huracán, De la Rosa Boscó ha enfatizado que la búsqueda de cuerpos sigue en curso y no se detendrá.
En una entrevista, el capitán naval explicó que, aunque la norma indica que los cuerpos suelen emerger en el mar al cuarto o quinto día, los buzos no han detectado más cuerpos en el agua. Por este motivo, la Secretaría de Marina ha desplegado maquinaria pesada, como las Dragas, para remover los escombros que yacen en el fondo marino.
De acuerdo con De la Rosa Boscó, de los 47 fallecidos a causa del ciclo tropical en Acapulco, aproximadamente el 20 por ciento ha sido registrado en el mar. Añadió que, aunque los rescatistas han logrado rescatar a dos personas y han localizado seis cuerpos en la zona de Caleta, ya no se considera una prioridad la búsqueda de víctimas en dicha área, dado que se ha completado la liberación de vías y la inspección exhaustiva. de las zonas afectadas.
El enfoque se ha desplazado hacia la zona conocida como la Escénica al Aeropuerto Internacional de Acapulco, específicamente el área de Acapulco Diamante, donde se concentran los esfuerzos de búsqueda y rescate. De la Rosa Boscó reveló que es probable que se encuentren más cuerpos en dicha área, y los rescatistas han decidido focalizar sus esfuerzos allí.
El capitán también mencionó que, según las evaluaciones preliminares, las zonas más afectadas del puerto por el huracán "Otis" incluyen el Club de Yates, Santa Lucía, El Pescador y puerto Marqués.
A pesar de los desafíos, el equipo de rescate continúa trabajando incansablemente para garantizar la seguridad y el bienestar de todos los afectados por esta desafortunada catástrofe natural.
Por Salvador Sánchez.
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