El pasado miércoles, el poderoso huracán "Otis" azotó Guerrero, dejando a su paso una estela de destrucción sin precedentes. Según fuentes oficiales, al menos 27 personas han perdido la vida y cuatro más permanecen desaparecidas. Acapulco, uno de los destinos turísticos más importantes de México, resultó ser el municipio más afectado, con un impacto directo del fenómeno en un 80% de su zona hotelera, según la gobernadora del estado, Evelyn Salgado Pineda.
Durante la conferencia matutina del Presidente Andrés Manuel López Obrador, la mandataria local presentó un informe preliminar de los daños, calificando el huracán como un "fenómeno atípico y totalmente devastador". Además, reveló que se había reunido con el presidente de la Asociación de Hoteles y Empresas Turísticas de Acapulco (AHETA), Alejandro Domínguez, quien confirmó el impacto en el 80% de los hoteles de la región.
En respuesta a la catástrofe, el presidente López Obrador se comprometió a reunirse con los representantes de la industria hotelera para la rehabilitación del sector y anunció un programa de construcción y mejora de viviendas para los afectados. La situación en Acapulco se ha agravado debido a la interrupción de las comunicaciones y la energía eléctrica, así como el cierre temporal del aeropuerto local, que ha dejado a muchos turistas varados.
Roberto Arroyo Matus, titular de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil del Estado de Guerrero, comparó los estragos de "Otis" con los causados por la explosión en Líbano en 2020, destacando que aproximadamente el 80% de los hoteles y el El 95% de los comercios en Acapulco han sufrido daños significativos.
Ante la emergencia, la gobernadora Salgado Pineda anunció el inicio de la evacuación de turistas y residentes afectados, facilitando de 30 a 40 autobuses diarios para su traslado gratuito a destinos seguros. Mientras tanto, el presidente informó que las aerolíneas Aeroméxico, Viva Aerobus y Volaris están coordinando esfuerzos para evacuar a los turistas varados en la región, ya que el aeropuerto de Acapulco se encuentra cerrado debido a los daños en su infraestructura.
Esta tragedia ha generado una respuesta urgente por parte de las autoridades y la sociedad en su conjunto, con un enfoque prioritario en la asistencia a los afectados y la pronta recuperación de la vital industria turística de Acapulco.
Por Omar Sánchez
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