La Albiceleste, dos veces campeona mundial, y una Australia con muchos menos pergaminos, chocarán hoy en los octavos de final, dentro de un cuadro que —en teoría— se le presenta bastante favorable al equipo sudamericano para llegar a la final del 18 de diciembre.
En un escueto historial de siete duelos, el más importante lo protagonizaron a fines de 1993, en el repechaje para el Mundial de 1994. Argentina no había superado la eliminatoria sudamericana, tras la bochornosa goleada que le propinó Colombia (0-5). Maradona, quien se había alejado del seleccionado tras su primer dopaje, decidió ayudar al equipo en la travesía.
Con el impulso del astro, Argentina ganó el partido de ida y empató la revancha en Buenos Aires, quedándose con el boleto a la Copa del Mundo.
Casi tres décadas después, y en un escenario todavía más impactante, el capitán Messi buscará convertirse en el talismán de un seleccionado que ha mejorado.
Por Julio Rodríguez