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Sin previo aviso, el Instituto Nacional Electoral (INE) ha desplegado una serie de visitas sorpresa de verificación en las internas de dos importantes actores políticos en México: Morena y el Frente Amplio por México. Estas inspecciones tienen como objetivo fiscalizar los recursos utilizados por los aspirantes presidenciales de cara a las elecciones del 2023-2024.
Según el INE, estas visitas sorpresa buscan regularmente los actos y la propaganda llevaron a cabo por partidos políticos, organizaciones ciudadanas, servidores públicos, personas aspirantes o inscritas en los procesos políticos, así como aquellas personas que organicen o participen en ellos.
Estas visitas inesperadas han generado una respuesta contundente por parte de Morena, quien ha presentado una queja formal ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). Morena alega que el Comité de Fiscalización del INE carece de la competencia necesaria para llevar a cabo este tipo de visitas, y han impugnado la determinación de la Presidencia de la Comisión de Fiscalización del INE, que concluye la realización de estas verificaciones antes del inicio de las precampañas y los periodos de obtención del apoyo de la ciudadanía de los procesos electorales 2023-2024.
No obstante, tanto el INE como el TEPJF han resuelto que los agravios de Morena son infundados. Argumentan que los lineamientos en cuestión fueron convalidados por el Consejo General del INE, y que estos lineamientos incluyen claramente la posibilidad de realizar visitas de verificación como parte de sus mecanismos de control y regulación.
Además de las visitas, el INE ha emitido una orden para que los partidos políticos nombren un enlace que colabore con el personal del órgano electoral durante estas inspecciones. Esto se hace con el propósito de garantizar una colaboración fluida y el cumplimiento efectivo de las normas establecidas.
Dentro de los lineamientos del INE se incluye el monitoreo de propaganda en vía pública e Internet, así como visitas de verificación para identificar eventos y recorridos, así como la distribución o colocación de propaganda por parte de los sujetos obligados o personas vinculadas.
Estas visitas sorpresa y la posterior queja presentada por Morena ante el TEPJF han generado un intenso debate en el panorama político mexicano. Mientras que el INE argumenta que estas medidas son necesarias para garantizar la transparencia y la equidad en el proceso electoral, Morena insiste en que se trata de una intromisión injustificada en sus asuntos internos. El resultado de esta disputa podría tener un impacto significativo en el rumbo de las elecciones presidenciales que se avecinan.
Por Omar Carmona
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