En un evento destacado para el sector empresarial, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) ha revelado un plan integral dirigido al próximo Gobierno de México, enfocado en capitalizar la oportunidad histórica que representa el nearshoring. El plan, compuesto por 14 objetivos estratégicos, busca impulsar el crecimiento económico y social del país aprovechando las ventajas del entorno económico actual.
Bajo el liderazgo de Francisco Cervantes, presidente del CCE, se ha delineado un plan audaz con la visión de posicionar a México como un líder mundial en la revolución industrial digital. El núcleo de esta iniciativa es la creación del Sistema Mexicano de Política Industrial Digital 2024-2040, respaldado por un Plan Nacional de Industria Digital y una reforma integral del Estado de derecho.
Entre los principales puntos del plan se destaca el aumento de la inversión como proporción del PIB, con el objetivo de alcanzar el 8% del PIB en financiamiento a través de la banca de desarrollo. Asimismo, se busca duplicar la inversión extranjera directa en cinco años, aprovechando las ventajas competitivas de México en términos de ubicación geográfica y mano de obra calificada.
Una reforma fiscal integral también figura entre las propuestas clave, con el objetivo de equiparar a México con el promedio de recaudación tributaria en América Latina. Se plantea destinar recursos significativos para la creación y mantenimiento de infraestructura, así como profundizar los compromisos en materia de energía limpia y reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
En el ámbito de la investigación y desarrollo, se propone un aumento progresivo de la inversión para situar a México entre los 30 principales países del mundo en este ámbito. Además, se buscará incrementar el contenido nacional en las exportaciones y promover una política industrial digital a largo plazo.
El plan también abarca iniciativas para la transformación digital, el fortalecimiento del comercio electrónico y la mejora de la conectividad, con el objetivo final de sostener un crecimiento económico anual del 5% para duplicar el PIB en un lapso de 15 años. Este ambicioso objetivo requerirá un esfuerzo conjunto entre el sector empresarial, académico y gubernamental, así como medidas específicas para fortalecer regiones como el sureste y modernizar la infraestructura portuaria para una mayor conectividad con Estados Unidos y Asia.
El CCE espera que este plan sirva como una hoja de ruta integral para el próximo Gobierno, aprovechando el potencial del nearshoring y orientando a México hacia un futuro próspero y sostenible en la era digital.
Por Omar Carmona